
La robustez de la construcción está garantizada por el uso de mangueras metálicas, juntas diseñadas como conos metálicos y tubos soldados con bridas y racores.
Entre las características clave de estos equipos de monitorización se incluye la estanqueidad verificable en las zonas de filtrado, que se consigue mediante juntas tóricas dobles en las uniones de separación. Estas juntas, que se pueden retirar durante el funcionamiento, garantizan la integridad del sistema. Un monitor de flujo integrado con un valor de alarma de 10 litros por hora proporciona una seguridad adicional.
Se da prioridad a la reducción de las pérdidas de partículas en todas las clases de tamaño, y nuestras unidades incorporan datos confirmados experimentalmente para validar su eficiencia. El diseño fácil de usar simplifica el funcionamiento y se adapta a los diferentes niveles de personal en entornos de trabajo dinámicos. Los filtros se pueden cambiar fácilmente sin desmontar las protecciones, lo que garantiza cambios rápidos incluso durante los cambios de turno.
Disfrute de un mantenimiento sin complicaciones gracias a la extracción del cartucho sin herramientas. A medida que evolucionan los requisitos sísmicos, nuestros monitores se diseñan para adaptarse a los espectros de respuesta de los edificios locales, lo que garantiza la resistencia y el rendimiento.
Estos monitores y muestreadores de aerosoles o yodo de primera clase cumplen la estricta normativa alemana de seguridad nuclear KTA y han sido homologados en varios países, entre ellos Suecia, Finlandia, España, Brasil y Argentina.